La ansiedad social es un problema común. Muchos de nosotros sentimos que a menos que nos esforcemos para esconder nuestros defectos, seremos juzgados o rechazados a causa de estos. Quizá sientas que eres aburrido(a) o poco interesante, o te preocupa que siempre dices la frase equivocada. Tal vez temas ser criticado(a) por tu vestimenta o por lo que has logrado, o no logrado, en la vida.
Pero, si sufres de ansiedad social, cómo te sientes antes de un evento social, bien sea reunirse en un bar, una fiesta del trabajo o una reunión familiar, ese no es un buen indicio de cómo te va a ir. Si sucumbes a estos sentimientos negativos y nunca te expones a situaciones sociales, perderás conexiones importantes y tu vida se empobrecerá a causa de ello.
Para una persona tímida o ansiosa, rara vez funciona decirle "no tengas miedo y sé tú mismo(a)". Cuando sufres de ansiedad ser tú mismo(a) es justamente el problema. Existen maneras de superar la ansiedad social y comenzar a disfrutar más de estas situaciones. En lugar de consumir alcohol como una forma de afrontar la ansiedad social, prueba algunos de estos consejos.
No esperes a tener ganas
Un error común es evitar hacer actividades sociales hasta que tengas ganas de hacerlo. Tal vez tengas la esperanza de que tu mente se ponga en marcha y comience a apoyarte, pero generalmente trabaja en contra tuya argumentando las razones por las cuales no deberías asistir. En su lugar, trata de utilizar la "acción contraria": cuando la ansiedad te dice "no", intenta hacer lo contrario. En algún momento, llegará a convertirse en un hábito.
Los "porqués" parecen muy creíbles y te dejan queriendo aislarte y esconderte, pero son preocupaciones sobre cosas que no han ocurrido y que posiblemente nunca lo harán.
- Dra. Jessamy Hibberd
Evita los supuestos (¿y si...?)
Cuando sientes ansiedad, es fácil comenzar a predecir lo peor. ¿Y si hago el ridículo? ¿Y si la gente no quiere hablar conmigo? ¿Y si no logro afrontarlo? Los "porqués" parecen muy creíbles y te dejan queriendo aislarte y esconderte. pero son preocupaciones sobre cosas que no han ocurrido y que posiblemente nunca lo harán. Cuando la ansiedad comience a hablar, haz una pausa, retrocede y recuérdate que "los pensamientos no son hechos".
Además, asegúrate de recordar cómo van las cosas. Tal vez te preocupaste de que pasarías un rato terrible y de que nadie iba a hablar contigo, pero realmente, aunque te sentías nervioso(a) apenas llegaste, terminaste teniendo una experiencia positiva. Intenta fijar eso en tu memoria y remítete a ello.
Céntrate en el 'ahora'
Es común utilizar "conductas de protección" para sentirte menos ansioso(a), tales como mirar tu teléfono, beber otro trago, preparar preguntas o ensayar lo que vas a decir de antemano. El problema es que esto probablemente va a dar justamente la impresión que quieres evitar, podrías parecer distante y con falta de interés, o podrías emborracharte rápidamente, y ocasionar más problemas.
Intenta enraizarte en lo que te rodea. Céntrate en el lugar en el que estás y en lo que está sucediendo como una distracción y una pausa a la ansiedad. Abandona las conductas de protección, intenta salir de tu cabeza y céntrate en lo que te están diciendo. Escucha realmente lo que la otra persona está diciendo, ya que esto deja espacio para la curiosidad, preguntas genuinas y para que puedas ser tú mismo(a). Esto significa que parecerás más sociable y disfrutarás mucho más del momento.
Date cuenta de que nadie va someterte a tanto escrutinio como tú mismo(a)
Cuando sientes ansiedad social, es fácil suponer que todo el mundo le está prestando atención a tu vida, pero la realidad es que la mayoría de las personas están más interesadas en sí mismas, preocupadas con sus propias vidas, sus propias inseguridades y miedos.
El escrutinio al que nos sometemos a nosotros mismos es completamente diferente del escrutinio al que sometemos a los demás. Piensa en cuando estás viendo fotos con tus amigos(as); las van pasando rápidamente pero, tan pronto como aparece una imagen de sí mismos(as), miran estas fotos por más tiempo.
¿Te imaginas que alguien te siguiera a todas partes diciéndote todas las cosas que la ansiedad social te dice a ti? Te sentirías impactado y dolido(a), sin embargo, eso es lo que te estás haciendo a ti mismo(a) todo el día.
- Dra. Jessamy Hibberd
Mira la ansiedad como la acosadora que es
La ansiedad social tiende a ir de la mano con la autocrítica, con menospreciarte y preocuparte de que otros te juzguen. ¿Te imaginas que alguien te siguiera a todas partes diciéndote todas las cosas que la ansiedad social te dice a ti? Te sentirías impactado y dolido(a), sin embargo, eso es lo que te estás haciendo a ti mismo(a) todo el día. Trata de ser más amable contigo mismo(a) y preguntarte, ¿qué le dirías a un amigo(a) que estuviera en tu misma situación?
Entender que la inseguridad y el dudar de sí mismos es algo humano
La inseguridad se intensifica aún más al imaginar que todos los demás saben lo que están haciendo y que tú eres el único(a) para quien las situaciones sociales son embarazosas. Incluso la gente que tú estás seguro que siente confianza en sí misma se siente insegura a veces. Tal vez se les dé bien dar la impresión de que se sienten seguros de sí mismos, como un cisne que se desliza suavemente, pero que siempre está remando con sus patas bajo el agua. La realidad es que todos dudamos de nosotros mismos a veces y que tenemos preocupaciones, inseguridades y miedos similares. Es parte de ser humano; nadie es perfecto y eso está bien.